El Lapislázuli (piedra azul), es una piedra semipreciosa compuesta por al menos 14 minerales diferentes, entre los que destacan la lazurita, que le proporciona su característico color azul; la wallostonita y la calcita, que producen sus vetas grises y blancas, y la pirita que la decora con reflejos dorados.
Solamente existe lapislázuli en dos lugares del planeta, en Afganistán y en Chile.
Por su intenso y exclusivo color azul, el lapislázuli siempre ha sido símbolo de pureza, salud, elegancia, suerte y nobleza.
Es por ello que esta espléndida piedra semipreciosa ha realzado las creaciones del hombre desde hace más de 6.000 años.
En algunos pasajes bíblicos, es descrito como Zafiro; Los griegos le atribuían propiedades curativas contra la fiebre y la melancolía; los faraones egipcios, la utilizaban en sus principales tronos; Cleopatra utilizó el polvo de Lapislázuli como el primer cosmético para ojos; los chinos la agregaban a sus vestimentas, contando con que les proporcionaría suerte y salud; Leonardo Da Vinci usó el polvo de lapislázuli (oro azul), en alguna de sus pinturas más valiosas.
En América, los Molles, Diaguitas y otras culturas pre colombinas, han utilizado el lapislázuli en máscaras y otros artefactos por más de 2000 años. En Chile, la mina está ubicada a 3.600 metros de altura, en la Cordillera de Los Andes, en la zona de Ovalle.